Se aportaron un total de 2.7 millones de pesos, de los que el Gobierno de Jalisco puso un millón, y Arca Continental e Industria Mexicana Coca-Cola, 1 millón 700 mil pesos más.
Arca Continental se encuentra en proceso de análisis para extender el programa a 2022, y ha colaborado en una estrategia más amplia para la gestión integral del agua en Jalisco, donde además de Escuela de Lluvia, aportaron en la construcción de un humedal basado en procesos naturales que tratará el agua urbana del municipio de Cihuatlán para abastecer actividades productivas que benefician a más de 18 mil habitantes. Se trata de un sistema de fitotratamiento o biofiltración, diseñado para la depuración de las aguas residuales replicando las interacciones y procesos físicos, químicos y biológicos de un humedal natural.
Así, como parte de las acciones que abonan al cambio de paradigma sobre la gestión del agua en Jalisco y el Área Metropolitana de Guadalajara, Escuela de Lluvia también es un programa educativo en el que se realizan talleres participativos con toda la comunidad escolar para conocer, reflexionar y diagnosticar la problemática hídrica e identificar la captación de lluvia como una alternativa viable y sustentable de acceso al agua.
El primer plantel público beneficiado con este sistema fue la escuela Carmen Aldrete Castillo, en Zapopan. Podrá captar, tratar y aprovechar hasta 381 mil litros de agua de lluvia al año apta para el uso de contacto humano como sanitarios, lavamanos, riego y limpieza general del plantel.
Un paso importante para atender planteles escolares en zonas vulnerables, fue llevar el programa a Poncitlán, dentro del Área de Intervención Prioritaria del proyecto Revivamos Río Santiago, por lo que dichas acciones suman al conjunto de recomendaciones emitidas por la CEDHJ.
El programa “Nido de Lluvia” tiene como objetivo hacer frente a la crisis hídrica que ha traído consigo la crisis climática, así como atender las desigualdades en la infraestructura urbana en zonas del Área Metropolitana de Guadalajara que históricamente han estado rezagadas en su abastecimiento de agua potable. Se basa en tres principios básicos: racionalizar nuestro consumo de agua, cuidando y recolectando agua doméstica para reusar; sostenibilidad a largo plazo, para no agotar las fuentes de agua y adaptarnos a sus ciclos naturales; y una nueva cultura de gestión del agua, para aprovechar el agua de ciclos naturales.
AE