El proyecto de Presupuesto que la Secretaría de Hacienda presentó el domingo, el consumidor que compra cigarros y bebidas endulzadas, que incluyen refrescos, jarabes y polvos, pagarán más el próximo año.
El paquete fiscal contempla incrementar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), con un alza de 42.9 por ciento a cigarros, que subiría de 35 a 50 centavos. En tanto, el cobro para bebidas endulzadas con azúcar pasaría de 1.17 a 1.27 pesos por litro, un aumento del 8.5 por ciento.
También cambia la fórmula del IEPS para bebidas energizantes, incluyendo polvos, que hoy pagan una tasa ad valoren (según el valor) del 25 por ciento sobre el valor, si la mezcla de cafeína u otro producto estimulante supera los 20 miligramos por cada 100 mililitros.
Del 2011 al 2018, la recaudación de energizantes cayó de 109.5 a 8.02 millones de pesos porque las empresas reformularon su contenido a menos de 20 miligramos.
La Industria Mexicana de Bebidas, que aglutina a 120 embotelladores, como Coca-Cola Femsa y Arca Continental, señaló que el alza afectará a un sector que ya tiene doble tributación -IEPS e IVA- y agravará el impacto a los más pobres.
Tras varias investigaciones por académicos, aseguran que el subir el impuesto a bebidas ha sido ineficaz en combatir la obesidad.
