- La auditoría descubrió que el gobierno federal sigue llevando adelante las labores de construcción sin tener un estudio financiero y ambiental.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó irregularidades en la obras de los tramos 1 y 4 del Tren Maya, que van desde pagos en exceso hasta obras no ejecutadas.
La auditoría presentada este lunes en la tercera entrega de revisión de la Cuenta Pública 2021 señala que en la construcción del Tren Maya Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) autorizó pagos en exceso y por obras no ejecutadas por mil 86 millones 755 mil pesos.
De ese total, 3 millones 742 mil pesos son por inconsistencias en el rubro del costo por financiamiento y 45 millones 928 mil pesos, por inconsistencias en el cálculo de ajuste de costos.
En una serie de 10 informes sobre el Tren Maya publicados ayer, la ASF descubrió, entre otros, que el gobierno federal sigue llevando adelante el proyecto del Tren Maya sin tener un estudio financiero, pues el dictamen que estaba previsto para 2020 nunca se realizó, y que el Análisis Costo Beneficio (ACB) del megaproyecto, que sirvió de justificación al proyecto, ya quedó rebasado por el aumento brutal del costo total del Tren Maya –de 12 a 20 mil millones de dólares–, pero el Fonatur sigue sin presentar una versión razonable del estudio.
Respecto a las factibilidades técnica, ambiental y económica, el Fonatur sigue operando con deficiencias, pues apenas en diciembre pasado pidió una prórroga de 180 días para presentar los datos actualizados sobre una serie de problemas identificados por un dictaminado privado, llamado IDEA Consultores.
De acuerdo con la ASF, en 2021 el Fonatur entregó 55 contratos, por un monto total de más de 70 mil millones de pesos.
De estos, 30 contratos lo fueron por adjudicación directa, y en 8 casos no presentó ninguna de las disposiciones requeridas –la investigación de mercado o el oficio de notificación–.
Cuando los auditores le pidieron copias de los contratos, el Fonatur alegó que no los localizó en sus archivos, lo que llevó el organismo fiscalizador a presentar una queja ante el Órgano Interno de Control (OIC).
El Tramo 4 del Tren Maya va de Izamal, Yucatán, a Cancún, Quintana Roo, tiene una longitud de 257 kilómetros. La vía contempla también obras complementarias, como cinco estaciones ferroviarias, dos zonas de servicio para carreteras, cuatro laderos, cuatro entronques, 61 obras de drenaje, una base de mantenimiento, ocho retornos, 26 pasos inferiores, 55 pasos ganaderos, 19 pasos de fauna, 62 caminos de acceso existentes y un camino de servicio.