La película Emilia Pérez, dirigida por el cineasta francés Jacques Audiard, ha desatado polémica en México antes de su estreno oficial, programado para el 23 de enero. La cinta, que ya se encuentra disponible en Netflix en Estados Unidos y ha sido proyectada en cines de otros países, aborda temas que han generado reacciones divididas entre críticos y el público mexicano.
La trama sigue a un capo del narcotráfico que, en un intento por evadir la justicia, decide realizar una transición de género mientras reflexiona sobre su identidad personal. Este enfoque ha sido objeto de críticas por lo que muchos consideran una representación estereotipada de la realidad mexicana, basada en el crimen organizado y la violencia. Además, señalan que la película pasa por alto problemáticas sensibles como las desapariciones forzadas, lo que ha intensificado el debate.
Otro punto de controversia es la falta de actores mexicanos en los roles principales, lo que ha generado cuestionamientos sobre la autenticidad de la representación cultural en el filme. Aunque ha sido proyectada de manera limitada en eventos exclusivos, como una función en la Cineteca Nacional para estudiantes de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Azcapotzalco, el público general deberá esperar hasta su estreno oficial para formar su propia opinión.
A pesar de las críticas, Emilia Pérez también ha recibido elogios de figuras reconocidas como Guillermo del Toro, quien destacó aspectos de la producción, y del crítico Álvaro Cueva, quien compartió recomendaciones para disfrutar de la cinta. Sin embargo, el debate está lejos de terminar.
En redes sociales, algunas iniciativas han intentado frenar su estreno en México a través de peticiones que buscan cancelarlo, argumentando que perpetúa una visión reduccionista del país. Por su parte, se rumora que podría ser incluida en el catálogo de Netflix Latinoamérica en un futuro, aunque esto aún no ha sido confirmado oficialmente.
Con opiniones divididas, Emilia Pérez promete ser una de las películas más discutidas del año en el país. Su estreno en las salas mexicanas podría marcar un punto clave en el debate sobre cómo el cine internacional representa a México y sus complejidades.