El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció una “pausa” en la relación con las embajadas de Estados Unidos y Canadá tras las críticas de ambos países a la reforma del Poder Judicial en México.
El embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, advirtió que la elección popular de jueces, propuesta en la reforma, podría poner en “riesgo” la democracia y facilitar la intromisión de los cárteles en el sistema de justicia mexicano.
Similarmente, el embajador canadiense, Graeme C. Clark, expresó preocupaciones sobre los efectos de la reforma en las inversiones extranjeras.
Durante su conferencia mañanera del 26 de agosto, López Obrador enfatizó que la “pausa” en las relaciones es exclusivamente con los embajadores y no afectará los vínculos con los gobiernos de esos países.
Recalcó la importancia de que estas naciones respeten la soberanía de México y manifestó que, aunque todos tienen derecho a expresarse, la Constitución mexicana establece el principio de no intervención, el cual debe ser respetado.
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