La Auditoría Superior de la Federación, encontró una serie de irregularidades en la compra de balasto, que son las piedras que se colocan para contener y repartir la carga del tren en el tramo del Ferrocarril del  Istmo de Tehuantepec.

Por su parte tras una investigación por el periódico REFORMA señalaron que las nuevas vías no cuentan con balasto, lo que generó que los durmientes se tronaran y las vías se desalinearan en incluso terminaran torcidas y en mal estado.

Sin embargo, la Auditoría Superior de la Federación detectó que esto será un gran daño y perjuicio en las líneas del tren, el erario registró un monto de 4 millones 38 mil pesos, por inconsistencias en las matrices de dos precios unitarios de dos conceptos de obra.

El primer contrato es el FIT-GARMOP-OP-Z-14-2019, relativo a la “Convocatoria de Rehabilitación de la Línea “Z” del FIT, que va de Medias Aguas Veracruz a Salina Cruz Oaxaca, (Corrección de 56 km de curvatura y pendiente y rehabilitación de 146.3 km de vía férrea), así como conexión al puerto de Salina Cruz en la Línea Z (Tramo Colonia Jordán – Salina Cruz km 276+245 al 308+100).

Y el otro de 72.1 millones de pesos en el concepto número 5.01, “Suministro y colocación de BALASTO cumpliendo con la AREMA tipo C4, ” toda vez que, se pagó el concepto de catálogo original con un precio unitario de 544.77 pesos, que multiplicado por el volumen ejecutado de 4,314.25 m3, resulta un importe de 2,350,273.97 pesos, sin embargo, debió ajustarse el precio unitario de catálogo original unitario que era de 528.05 pesos.

El total de los trabajos fue de 50.4 millones pesos, debiendo ser de 46.5 millones.

Señalaron que en ningún momento se proporcionó alguna documentación comprobatoria del pago de facturas y transferencias, así como una documentación que acredite la entrada  en almacenes como remisiones, ni las entregas del material, y por si fuera poco se registró un incumplimiento del Reglamento de la Ley de Obras Públicas y  Servicios relacionados con las mismas.

Recordemos que en el mes de junio de 2020 se informó que se rehabilitaría 185 kilómetros de vías férreas en el que se pretendía una inversión de 3 mil 113 millones de pesos,  donde las obras concluirían en el mes de abril de este año.

Rael Marín Mollinedo, director del Corredor Interocéanico fue el que dio a conocer las fallas y el que abrió la investigación para que la Auditoría Superior de la Federación,  saliera a la luz con sus fallas que se registraron ante dicha adquisición.