El pugilista refirió que lo que quiere es volver al ring.
Por supuesto incumplimiento de contrato, el boxeador mexicano, Saúl Álvarez, demandó a la compañía Golden Boy Promotions (GBP), su dueño, Oscar de la Hoya y a la plataforma de streaming DAZN, quienes son los responsables de maejar su carrera.
De acuerdo al sitio de deportes, The Athletic, además de incumplimiento de contrato, el Canelo alega también interferencia de contrato, interferencia negligente de contrato, interferencia de prospectiva económica, fraude e incumplimiento de deber fiduciario han causado daños por, al menos, 280 millones de dólares, y solicitó que le permitan trabajar con otra promotora y también otro sistema de distribución de sus peleas.
La demanda se habría presentado este martes ante una corte federal con sede en Los Ángeles, California.
A través de GBP, el pugilista habría firmado un contrato con DAZN por 365 millones de dólares para llevar a cabo y transmitir 11 peleas, compañía que se habría negado a garantizar el pago tanto a la promotora de Oscar de la Hoya como a Canelo.
En cuanto a la agenda de 2020 que sufrió cancelaciones y modificaciones por la pandemia de Covid-19, Saúl y GBP habrían estado de acuerdo en pelear sin público, pese a las pérdidas económicas que ello representaría, sin embargo, DAZN nunca respondió a los cuestionamientos y cuando el equipo del mexicano propuso rivales la plataforma no confirmó si estarían listos para transmitir los eventos y si podrían pagar sus obligaciones.
“Álvarez busca una decisión judicial sobre los derechos legales y deberes de las partes, incluyendo, pero no limitado al incumplimiento de los demandados, que sea elegible para participar en peleas montadas y promovidas por otras entidades que no sea Golden Boy Promotions y distribuidas por otras entidades que no sean DAZN”, se lee en la demanda.
Además, en el documento se expone que de no arreglarse, se desperdiciarían los mejores años de la carrera de Canelo.
EVC