Con fracturas en una muñeca y los dedos de los pies, así como contusiones en el rostro quedó Raymundo, quien es sordomudo, luego de una agresión por parte de agentes de la Fiscalía General del Estado.
De acuerdo con la familia del joven de 22 años, el pasado 12 de marzo él circulaba en una motocicleta de bajo cilindraje cuando los agentes lo interceptaron en el cruce de Jorge Cázares Campos y Rufino Tamayo, en la Colonia Lomas de Tlaquepaque
“Se le pidió el alto, pero mi hermano como no oye, no habla, él no se podía parar, entonces se hacía a un lado para poder darles el paso, porque él pensaba eso. Al ver que mi hermano no se paraba lo empezaron a jalonear”, relató Alicia Torres González, su hermana.
“Cuando lo jalonean, hacen que pierda el control de la moto, que se caiga y tenga lesiones, fracturas; una vez tirado, lo encañonan con una pistola y lo empujan, (tratando de) obligar a que hablara, como él no puede hablar, les decía como podía que no oía, no hablaba, que lo dejaran en paz”.
Los agentes presuntamente dijeron que iban en persecución de un motociclista y confundieron a Raymundo.
Después del incidente, movieron al joven de lugar hasta el cruce de República de Panamá y Américas y llamaron al 911 para pedir auxilio médico.
Por el caso se inició la carpeta de investigación 28235/18, y los parientes del joven presentaron una queja en la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
Al principio los agentes tuvieron un acercamiento para reparar el daño y ofrecieron 3 mil pesos; luego les dieron evasivas, indicó Alicia.
Para Francisco Macías Medina, académico del ITESO y especialista en temas de Derechos Humanos, casos como el de Raymundo demuestran que el protocolo de la Fiscalía respecto a las detenciones no se aplica al pie de la letra, y que se necesita más capacitación para que se respeten derechos como a la igualdad y no discriminación.
El Artículo 61 de la Ley de Movilidad y Transporte señala que la Secretaría de Movilidad verificará que las personas con discapacidad cuenten con las habilidades y aptitudes necesarias para conducir un automotor.
Respecto a los documentos necesarios para circular, familiares del joven indicaron al principio tener todos los papeles en regla, aunque luego aclararon que eran sólo los de la motocicleta y no la licencia de conducir de Raymundo.