Una tragedia sacudió a la ciudad de Nueva York cuando un niño de tan solo 1 año de edad falleció en el interior de una guardería debido a una aparente exposición a fentanilo.
Esta sustancia también afectó a otros tres menores, incluida una niña de 8 meses que dio positivo a la droga.
La dueña de la guardería, Grei Mendez, operaba el establecimiento conocido como “Divino Niño” dentro de un apartamento en el Bronx.
El día del trágico suceso, Grei Mendez llevó a los niños al piso superior de la guardería, les leyó, les cocinó y los acostó para su siesta habitual. Sin embargo, cuando Nicholas Dominici no se despertó de su siesta, Mendez se alarmó y llamó al 911, además de alertar a sus vecinos.
Las autoridades descubrieron rastros de la droga debajo de una colchoneta en la que los niños dormían la siesta, además de encontrar una prensa utilizada para mezclar la droga con otros narcóticos, oculta en un armario que conecta al apartamento.
Grei Mendez, la propietaria de la guardería, se declaró inocente el domingo de los cargos de homicidio relacionados con la muerte de Nicholas Dominici, el niño de 1 año.
Por otro lado, Carlisto Acevedo Brito, un hombre de 41 años que alquilaba una habitación dentro del apartamento donde operaba la guardería, donde se encontró otra prensa.
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, expresó su indignación por el incidente y condenó enérgicamente a aquellos adultos que llevan fentanilo a lugares donde hay niños.
Ingerir incluso una pequeña cantidad de esta droga en estado puro puede ser fatal para un adulto, lo que hace que la situación sea aún más alarmante en menores.