El delegado Carlos Lomelí quien es señalado por tejer una red de empresas que en los últimos 13 años le habría permitido obtener contratos millonarios con 17 gobiernos estatales y con el federal, no ha sido citado a declarar por parte de la Secretaría de la Función Pública, tras dichos señalamientos.
“No he tenido ningún citatorio. Estamos a disposición de las autoridades correspondientes. Estamos trabajando y tranquilos” afirmó.
Una investigación de Grupo Reforma, arrojó que el funcionario está relacionado con 21 empresas y 3 asociaciones civiles, operadas principalmente por familiares, pero también por socios y empleados; su principal giro es el farmacéutico, aunque ha incursionado en inmobiliarias y publicidad.
La farmacéutica Abisalud, destaca entre las empresas del delegado, la cual ganó en lo que va de 2019 más de 164 millones de pesos en contratos adjudicados por el Gobierno de López Obrador.
Durante la actual administración, iniciada el 1 de diciembre de 2018, Abisalud ha tenido siete contratos con el Instituto Nacional de Pediatría y el Centro Regional de Alta Especialidad de Chiapas, dependientes de la Secretaría de Salud. Cinco de ellos fueron adjudicaciones directas.
La cabeza de la bancada de Morena en el Congreso de Jalisco fue tomada la semana pasada por Érika Pérez, cuyo esposo Juan Carlos Tadeo Martínez es accionista de Abisalud, una de las empresas con las que se relaciona a Lomelí. Al respecto, el delegado señaló que fue un movimiento fruto de “la vida interna de la bancada” con el que menciona, él no tuvo relación alguna.